Existen más de 6 millones de desempleados en España esperando un puesto de trabajo que surja de un puñado de fórmulas económicas que están en crisis (en crisis están las formulaciones, no las personas; las personas no están en crisis, son las fórmulas económicas del siglo XX las que no han sido adaptadas a las nuevas necesidades, y se nos impone un régimen que no cuenta con Todos. Estás fórmulas entienden de números, no de corazones, y no disponen de cuantías acordes a los parámetros necesarios para incluir a las minorías marginadas dentro del conjunto social.
Se anteponen las cuentas numéricas al Bienestar. Esto sucede por el momento en la mayoría de lugares del planeta, pero... ¿pueden dejarse de lado estas cifras de la Época Industrial?
La población deja de estar cegada e insensible.
La población ha aprendido y compartido los intentos fallidos de políticos ineficaces a las problemáticas que afectan directamente a las mayorías que se esfuerzan por ayudar a las minorías, pero estas ayudas son insuficientes.
Idea creativa del Marketing del Bienestar: Pleno Empleo ¡Ya!
¿Acaso no se puede
generar empleo pagando directamente a las personas
, como "autónomos por cuenta propia o ajena", pudiendo trabajar de una empresa a otra con total libertad y según se necesite en unos sectores u otros para adaptarse a las necesidades cambiantes de las diversas categorías comerciales?
Las empresas estarían encantadas de aumentar sus plantillas con este planteamiento. Los actualmente contratados dejarían de trabajar por dos, con 10 ó 12 horas diarias de jornada en stress laboral... un sin vivir que debería evitarse para tener más tiempo para la familia, el deporte, la naturaleza, la cultura, etc.
En definitiva, y como alternativa, pueden establecerse jornadas de 4 horas para distribuir las tareas laborales, adaptando el valor del trabajo bien hecho a una remuneración conforme al siglo XXI.
Esta multitud de franjas de trabajo a cubrir daría opción a poder trabajar en lo que uno/a desea, y además se cubrirían 24 horas del día: son 6 turnos de 4 horas a elegir.
Menos fórmulas económicas y más vidas dignas. El resto, las barreras, son parte del pasado y su ineficacia está demostrada.
A crisis económicas, soluciones humanitarias.
Compartir equitativamente es una opción, y el dinero se genera, se imprime, por tener un plan basado en la confianza y la evolución global de las personas dentro de la Naturaleza, no por ajustarse a unas fórmulas que no benefician a toda la sociedad.
